Hay que prestar atención cuando se va a ingerir un alimento que está crudo porque puede tener terribles consecuencias en la salud y en el orgamismo. Si se cocinan los alimentos es por varios motivos, y es que el calor es un poderoso higiniezante que es capaz de eliminar microorganismos y otros organismos vivos de los alimentos, siendo alguno de ellos capaces de provocar algunas enfermedades. Por lo tanto, ingerir alimentos crudos, bien sean de origen animal o vegetal y que por lo tanto no se han sometido a ningún proceso de elaboración como esa aplicación del calor, puede ser un factor de riesgo.
Existen personas que se alimentan casi de forma exclusiva de todo tipo de productos crudos. A este grupo se le llama crudívoros, y son los que mayor probabilidad que el resto de la población tienen a sufrir una alteración alimentaria. En la mayoría de los casos en los que se consume algún tipo de alimento crudo las medidas de 'seguridad' son dos: conseguir un producto de confianza en su origen que por supuesto debe estar muy fresco, y por otro lado, extremar las medida de higiene en cuanto a conservación y manipulación.
¿Por qué no comer alimentos crudos?
Los alimentos crudos que más se consumen son las verduras y las hortalizas y eso es un grave error porque este acto es un vehículo de transmisión de microorganismos patógenos o parásitos, como el famoso toxoplasmas, sobre todo, por contaminación a través del agua de riego o el propio sustrato de tierra. Es por eso que es de vital importancia el cocinar o en su defecto lavar bien, en este caso frutas o verduras, para eliminar cualquier tipo de elemento contaminante para la salud. Ésta puede realizarse, además, con una solución de agua con unas gotas de lejía, que son aptas para la desinfección del agua y alimentos (siempre hay que tener especial cuidado a la hora de hacer este tipo de manipulaciones y leer correctamente las instrucciones).
Así mismo, los pescados y algunos mariscos como los cefalópodos pueden tener larvas de anisakis si se consumen crudas, y eso ocasiona problemas de salud. Por este motivo se debe cocinar, ya que las larvas de anisakis no soportan más de unos segundos a temperaturas por encima de los 60 grados. Los alimentos de origen marino también pueden contener microorganismos, como vibrios o virus, como el de la hepatitis. Lo mismo ocurre con el consumo de carne cruda o poco hecha, que se relaciona con desarrollo de toxoplasmosis, una patología peligrosa sobre todo durante el embarazo. A continuación 13 alimentos que no se deben comer crudos bajo ningún concepto.
Leche cruda
Este alimento, la leche cruda, es aquella derivada de cualquier animal sin haber sido hervida o pasteurizada previamente. Bacterias tales como Brucella, Campylobacter, Cryptosporidium, E. coli, Listeria o Salmonella son causantes de diferentes patologías gastrointestinales y pueden ser transmitidas si se bebe leche cruda. Es por eso que es recomendable para prevenir cualquier tipo de dolencia no beber leche cruda o hervir la leche para eliminar dichas bacterias.
Carne de vaca
Nunca es bueno comer carne cruda o poco hecha porque es una fuente de bacterias que pueden provocar patologías gastrointestinales como la salmonelosis o el SUH. Para asegurar la salud se debe de cocinar la carne vacuna a unos 70 grados para así garantizar la muerte de todo tipo de microorganismo patígeno.
Huevos
Es evidente, que los huevos crudos no son nada saludables para el organismo. Si se ingiere algún tipo de alimento, como puede ser la tortilla se puede padecer de Salmonella, una bacteria muy frecuente e intensa a nivel gastrointestinal pero que se elimina si el huevo está bien hecho. Por eso es recomendable cuando se come tortilla fuera de casa que sea recién hecha y decirle al cocinero que no la deje muy cruda.
Pollo o pavo
Este tipo de carne son algunas de las que más concentraciones de Salmonella pueden presentar. Por este motivo, como ocurre en los casos anteriores, es necesario hacer bien el pollo o el pavo para evitar cualquier tipo de enfermedad. Además, tal como revela una investigación que se publicó en el Journal of Agricultural and Food Chemistry, las proteínas de estas carnes se asimilan mejor después de la cocción.
Carne de cerdo
Por otro lado, se encuentra la carne de cerdo, que no solo puede ser una fuente de E.coli (sustancia tóxica) sino también de un parásito de la familia de los nematodos que puede llegar a oacasionar una enfermedad llamada triquinosis. Esta enfermedad desarrolla dolor e inflamación muscular, fiebre, diarrea, debilidad y molestias abdominales. Por este motivo es necesario cocinar la carne de cerdo, además, de que se digiere mucho mejor.
Patatas
Es cierto, que la patata siempre es un aliemento que suele comerse cocinado, pero en el caso de que se quisiera ingerir una patata algo cruda no se aconseja debido a que su almidón resultará muy indigesto y puede ocasionar hinchazón abdominal e incluso diarrea. Además, la patata cruda puede contener sustancias tóxicas para el organismo humano, como es la solanina que se encuentra bajo la piel y tiene un color verdoso.
Legumbres
Las legumbres son fuente de hidratos de carbono complejos que no pueden digerirse sin previa hidratación y cocción. Por ello, si queremos evitar un marcado desorden gastrointestinal siempre es mejor su ingesta previa cocción. Por otro lado, las legumbres son fuente de saponinas, un antinutriente que puede evitar la correcta absorción del hierro como señala un estudio de British Journal of Nutrition.
Yuca
La famosa yuca, es una raíz que contiene cianuro o glucósidos cinogénicos, sustancias químicas que liberan cianuro cuando se comen y puede resultar muy tóxico para el ser humano. Esta toxina está en sus hojas pero en algunas ocasiones llega hasta la raíz comestible. Por este motivo es fundamental su cocción.
Brócoli o coliflor
Entre las verudas, el brócoli y la coliflor no deben consumirse bajo ningún concepto crudas. Deben cocerse porque contienen altas concentraciones de oxalatos que pueden reducir la absorción del hierro y gracias al tratamiento previo disminuye considerablemente.
Aceitunas
Son de lo más apetecibles, sobre todo para poner como snack de picoteo, pero lo cierto es que las aceitunas directamente cogidas del árbol y consumidas sin ningún tipo de tratamiento contienen una alta concentración de un compuesto que se denomina oleuropeína, que es lo que les da el sabor amargo y que se reduce de manera considerable cuando se ponen a remojo y en cocción.
Arroz
Este alimento, como ocurre con otros cereales, es una fuente de almidón, por lo que no se digiere bien sin previa cocción. De hecho, el mayor riesgo de consumir arroz crudo o poco cocido es que puede conservar gran parte de su contenido arsénico, un compuesto que puede llegar a ser muy tóxico si se consume en grandes cantidades.
Almendra amarga
Generalmente la que más se consume son las almendras dulces, y a pesar de que las almendras amargas son una variante de las primeras, es muy peligrosa debido a que contiene ácido hidroánico, que es una combinación peligrosa de cianuro de hidrógeno y agua. Esto puede ocasionar una intoxicación, que incluye síntomas como los mareos, el dolor de cabeza, vómitos y hasta pueden llegar a dar comvulsiones. Es por eso que es importante tratar este alimento para eliminar el componente dañino que ocasione estas consecuencias tan desagradables para la salud.
Setas
Cuando se hace la recolecta de setas, está terminantemente prohibido ingerir cualquiera de éstas hasta que no se hayan analizado bien, ya que hay algunas que son potencialmente peligrosas y que pueden llegar a ocasionar la muerte en el peor de los casos, por contener algún tipo de veneno. Por eso hay que tener mucho cuidado a la hora de saber que setas son comestibles y cuales no. Además, hay dos razones por las que no se deben consumir las setas crudas. Los hongos silvestres crudos pueden ser difíciles de digerir, por lo que cocinarlos ayudará a evitar la molestia gastrointestinal y, también cocinándolas se descomponen los compuestos dañinos.