El kéfir es un derivado de la leche que se asemeja bastante al yogur y que ya hace un par de años que se puso de moda entre aquellas personas que buscan seguir una dieta sana y equilibrada. Se trata de leche fermentada de vaca y de cabra que contiene gránulos de kéfir; es decir, un fermento vivo que contiene levaduras, bacterias y caseína coagulada.
La diferencia entre el kéfir y el yogur radica en que este último surge a raíz de una fermentación de tipo láctica y en el primero por una fermentación lactoalcohólica. Esto no evita que las propiedades de ambos productos sean bastante similares, aunque el kéfir es algo más líquido, con un sabor más ácido y más digestivo. Si quieres animarte e introducir el kéfir en tu rutina de comidas diarias aquí tienes algunas sugerencias sobre cómo consumirlo.
Bol de avena y kéfir
Sin duda, una de las formas más sencillas de utilizar el kéfir es sustituyéndolo por un yogur en tus boles de fruta diarios.
Ingredientes
- 200 ml. de Kéfir
- 100 gr. de fresas
- 100 gr. de frambuesas
- Un poco de zumo de limón
- 1 cucharada pequeña de vainilla
- Azúcar
- 2 cucharadas de copos de avenas
- 1 cucharada de avellanas trituradas
Preparación
- Lo primero que tendrás que hacer es lavar la fruta, reservando algunas para la decoración y triturando el resto con un tenedor.
- Luego agrega un poco del zumo de limón, la cucharada de vainilla y azúcar al gusto y mezcla hasta integrar todos los ingredientes.
- Deja reposar 15 minutos y luego echa la mezcla en un bol y echa el kéfir por encima.
- Bate todo bien junto a la avena.
- Espolvorea por encima las avellanas trituradas y el resto de la fruta que habías reservado al principio.
Bizcocho de kéfir y semillas de amapola
En general, el kéfir puede sustituir siempre al yogur cuando se trata de un bizcocho. Para preparar este con semillas de amapola es así de sencillo.
Ingredientes
- 200 gr. de harina integral
- 125 ml. de aceite de oliva
- 100 gr. de fructosa
- 80 gr. de azúcar moreno
- 3 huevos pequeños
- 1 vaso de kéfir
- 1 naranja
- 1 sobre de levadura en polvo
- Semillas de amapola
- Sal
Preparación
- 250 gr. de kéfir de vaca
- 250 gr. de yogur natural
- 200 gr. de azúcar
- Mermelada al gusto
Preparación
- En un recipiente grande junta todos los ingredientes, incorporando 4 o 5 cucharadas de la mermelada que hayas decidido utilizar.
- Bate todo hasta que los ingredientes se hayan integrado perfectamente y tengas una masa homogénea.
- Luego mete la mezcla en la nevera durante 1 hora, pasándolo luego a un recipiente que puedas meter en el congelador.
- Déjalo ahí durante 24 horas y luego ya podrás darte un caprichito siempre y cuando te apetezca algo dulce.
Tarta de queso
¿A quién no le gusta una deliciosa y cremosa tarta de queso? Puedes prepararla de forma muy sencilla con esta receta que sustituye el queso por kéfir de queso.
Ingredientes
Preparación
El primer paso para preparar esta tarta es hacer el caramelo.
- Para ello, pon 4 cucharadas de azúcar con 4 cucharadas de agua en una pequeña cazuela.
- Pon a calentar a fuego medio sin remover.
- Cuando la mezcla comience a burbujear y a oscurecerse, coge el cazo y dale vueltas para que el azúcar se mezcle.
- Finalmente, cuando el caramelo haya cogido su característico tono tostado retíralo del fuego y espárcelo por la base y las paredes del molde en el que vayas a hacer la tarta.
El siguiente paso será preparar la crema:
- 100 gr. de almendra tostada
- 100 gr. de kéfir
- 100 ml. de leche
- 4 calabacines
- 1 cebolla
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Pimienta negra molida
- Nuez moscada
Preparación
- Comienza pelando los 4 calabacines, siendo lo más idóneo que sean de tamaño mediano.
- Trocéalos en pequeños cubos y luego échalos en una cazuela y resérvalos para más adelante.
- A continuación, pela la cebolla y córtala en juliana.
- Echa un chorrito de aceite de oliva en una sartén y ponlo a calentar, pochando luego la cebolla en él hasta que esté tierna y haya adquirido un aspecto transparente.
- Agrégala luego a la cazuela en la que está el calabacín junto a los 100 gramos de almendra tostada que previamente tendrás que haber picado.
- Tritura todo bien con la ayuda de una batidora de mano y agrega, por último, los 100 gramos de kéfir y los 100 ml. de leche.
- Bate todo bien hasta que tengas una crema homogénea y lisa.
- Sazona al gusto con sal, pimienta negra molida y nuez moscada.