La coliflor es una inflorescencia que tiene forma redondeada, carnosa y de gran tamaño ideal para mantener una dieta sana y equilibrada. Pertenece a la familia de las crucíferas, que engloba nada más y nada menos que 300 géneros y unas 3.000 especies propias de regiones templadas o de clima frío. El término brassica, que es el género al que pertenecen, es el nombre latino de las coles. Dentro de esta familia se encuentra la coliflor, el repollo, el brócoli, la lombarda entre otros.
Esta verdura procede de las regiones del Mediterráneo oriental, para ser exactos del cercano oriente (Asia Menor, Líbano y Siria). Antiguamente no era consumida como alimento sino como remedio para los dolores de cabeza o la diarrea, es decir tenía fines curativos y no alimenticios. Los romanos fueron los primeros en cultivar la coliflor y desde Italia se fue extendiendo por el Mediterráneo. Actualmente, China es el principal productor de la coliflor.
Es necesario saber que la coliflor tiene multitud de variedades que pueden clasificarse en función de: su olor, y colores; blancas, verdes y moradas. Por un lado, la coliflor blanca es la más común y la que vemos día tras día en los supermercados. El color blanco se debe a que los agricultores unen por encima de la mata las hojas verdes que la rodean impidiendo la entrada del sol. También, entre sus variedades, se encuentra la coliflor verde, esta variedad es más aromática que la anterior y posee más vitamina C.
La coliflor morada, es caracterizada por la presencia de antocianinas, unos pigmentos con acción antioxidamente, que hace que tengan ese color. El color desaparece con la cocción y da lugar a un color amarillento verdoso. Cabe mencionar; las coliflores tropicales, coliflores vernalizantes y no vernalizantes. Los mejores meses para comer la coliflor son de septiembre a enero, que es su época de cosecha.
Calorías de la coliflor
Esta verdura no presenta ningún daño perjudicial para la salud ya que posee 25 calorías por cada 100 gramos, pero a su vez no es un alimento muy energético. Si es cierto que no daña el organismo y ayuda a ciertas zonas del cuerpo pero no es la verdura con más propiedades. Añadir coliflor a la dieta diaria ayuda también a la pérdida de peso y para dietas de adelgazamiento ya que tiene un gran poder saciante.
Propiedades de la coliflor
La coliflor posee grandes cantidades de agua siendo este su principal componente, es baja en hidratos de carbono y proteínas grasas, lo que la convierte en un alimento de escaso aporte calórico. No obstante, si se considera una fuente de fibra así como de vitaminas y minerales. Destacan la vitamina C, y B6. También contiene otras vitaminas del grupo B, como la B1, B2, B3, pero en menores cantidades.
Gracias a la vitamina C tiene una acción antioxidante, que interviene en la formación de colágeno, huesos, dientes y glóbulos rojos, sin olvidar que favorecen la absorción del hierro de los alimentos y mejora considerablemente las defensas frente a las infecciones. Los folatos participan en la producción de glóbulos rojos y blancos, ayudando así a la creación de anticuerpos beneficiosos para el sistema inmunológico. La vitamina B1, actúa directamente en el metabolismo de los hidratos de carbono, y su deficiencia se puede relacionar con alteraciones neurológicas o psíquicas (cansancio, irritabilidad o depresión, entre otros).
La vitamina b2, crea anticuerpos y glóbulos rojos y ayuda a la producción de energía. Al tener vitamina b3, hace que funcione correctamente el sistema digestivo y nervioso además, del metabolismo celular. La coliflor se considera un alimento rico en potasio y fósforo gracias a su alto contenido en minerales. También posee potasio, necesaio para la transmisión del impulso nervioso y la actividad muscular normal.
Recetas con coliflor
Uno de los platos más comunes es la coliflor con bechamel, primero se cuece la verdura y se hace la salsa por otro lado, se mete al horno todo junto y, ¡voilá! un plato delicioso. No obstante, se puede comer sola con un chorrito de aceite, ya que es mucho más saludable que el plato anterior. Se pueden incluso hacer hamburguesas de coliflor, que por otro lado es una manera saludable de comer un plato delicioso.
La coliflor con cúrcuma, un plato de lo más curioso y sano en el que tan solo se necesita, coliflor, una cucharada de pimentón, pimienta negra recién molida, una cucharada de cúrcuma, una pieza de cayena, una cucharadita de azúcar (se puede prescindir de este ingrediente), 4 o 5 cucharadas de aceite de oliva virgen extra y un diente de ajo.
El método de elaboración es de lo más sencillo. En primer lugar precalentamos al horno (180 grados), se pelan y pican el diente de ajo, se lava la coliflor y se separa en pequeños amos y se coloca en la bandeja que se va a introducir al horno. En un bol grande se mezcla el resto de ingredientes y por último, se hecha por encima de la coliflor. En 20 minutos estará el plato.