Dieta depurativa para vegetarianos

Siempre es bueno hacer dieta depurativa porque se eliminan toxinas y el organismo lo agradece. Además, no solo se notan cambios en el interior, sino en el exterior, ya que el cabello brillará con más fuerza al igual que las uñas crecerán con más resistencia y la piel lucirá mucho más vitaminada. No hay que olvidar tomar 1,5 litros de agua al día, ya que eso también ayuda además, de tener el cuerpo hidratado, a mantener un equilibrio en el organismo. Si se bebe más del litro y medio mucho mejor, pero como mínimo esa cantidad, por eso es recomendable llevar siempre una botella de agua para poder ingerir de vez en cuando.

Las dietas depurativas son muy buenas para tu cuerpo

Por otro lado, la dieta depurativa de cualquier tipo, en rasgos generales, ayuda a mantener un sistema inmune fuerte, elimina el cansancio que la piel refleja, el hinchazón,... y además se pierden bastante calorías. Una dieta depurativa vegetariana sirve para limpiar el organismo y aportar los nutrientes necesarios para un correcto funcionamiento de los órganos, y sobre todo ayuda a mejorar la calidad de vida.

Beneficios de una dieta vegetariana depurativa

No son pocos los beneficios a la hora de realizar esta dieta, ya que ayuda a disminutir los niveles de colesterol de manera bastante efectiva al igual que ocurre con los triglicéridos. A su vez, contribuye a reducir la tensión arterial. Asimismo, mejora el rendimiento físico como mental, aumentando a su vez la calidad de sueño que propicia un buen descanso. Optimiza el metabolismo:gástrico, hepático, intestinal y renal, entre otros.

El organismo se verá fortalecido ante cualquier bajada de defensas por lo que será más complicado caer enfermo, ya que el cuerpo cuenta con los nutrientes necesarios y con reservas para afrontar sobre todo las épocas de bajas temperaturas donde la gripe y los constipados acechan con más fuerza.

Mejorará todo por dentro y fuera de ti

Cabe destacar que hay ciertos alimentos que están prohibidos en esta dieta como lo es la bollería industrial, las chucherías, los snacks, los refrescos, o cualquier alimentos procesado, sobre todo los fritos. La carne también está prohibida, los lácteos, el chocolate y el acohol. A su vez, en el bando contrario, alimentos que deben de estar obligatoriamente incluidos en una dieta vegetariana depurativa son hortalizas, verduras, frutas, frutos secos, aceite de oliva o de girasol, limón o el pan casero, entre otros.

Recetas depurativas para vegetarianos

Lo primero hay que comenzar a hacer un planning de los días en los que se va a realizar la dieta depurativa para así llevar un control y no repetir alimentos, y que de esa manera sea una dieta variada y nada monótona. El primer día, (ya que suelen ser tres días de dieta vegetariana depurativa, no más), se desayunará lo siguiente: Se puede comenzar el día con un té o una infusión con una rodaja de limón, ya que este tiene muchas propiedades antisépticas para limpiar el organismo, sobre todo en ayunas. Un zumo de frutas natural, por ejemplo de pomelo o naranja par acompañar. A media mañana un yogur desnatado.

Para comer, una sopa de verduras o macedonia de frutas (se puede cambiar por un zumo de tomate). De segundo, una ensalada verde aliñada con aceite de oliva virgen extra y un chorrito de limón. De postre una fruta de temporada En cuano a la cena, una taza de sopa vegetal o un plato de verduras frescas hervidas al vapor.

En el segundo día, se pude optar por otro zumo natural de cualquier furta acompañado de un vaso de agua con limón. A media mañana, unas tortitas de avena. Después a la hora de la comida pure de verduras (de judías verdes, de calabaza, de puerros o de cualquier vegetal) y de segundo, unas verduras al vapor. De postre, igual que el día anterior una fruta o en su defecto una macedonia de frutas. Para cenar, una sopa de champiñones junto a un plato de judías verdes con ajo.

Un zumo de frutas natural y verduras le sentarán genial a tu cuerpo

Por último, para finalizar la dieta vegetariana depurativa, se desayunará lo mismo que los días anteriores. Un vaso de agua en ayunas con un chorrito de limón, siempre natural, por supuesto y un zumo de frutas con un té o infusión. A media mañana o torta de avena o fruta y para comer una ensalada verde con tomates, aliñada con aceite de oliva virgen extra, y de postre una infusión, de té verde. Para terminar la dieta, la cena será un plato de brocoli o una menestra de verduras. El organismo lo agradecerá.

Complementar la dieta con ejercicio

Siempre hay que acompañar a cualquier tipo de dieta con un poco de ejercicio, por lo tanto salir a correr aunque sean 15-20 minutos diarios serán suficientes para que el cuerpo elimine además más calorías y se sienta fortalecido. No hay que olvidar calentar para evitar cualquier tipo de lesión. Si por ejemplo correr no gusta mucho siempre se puede andar rápido para que el cuerpo no esté parado y se rompa con el sedentarismo. Cualquier gesto por hacer cualquier tipo de actividad el cuerpo lo agradecerá, mejorando así la calidad de vida y sobre todo del descanso.