El dolor de espalda es el problema más frecuente en embarazas. Este dolor se presenta en prácticamente todas las mujeres en al menos algún momento del embarazo, pero a partir del tercer trimestre es cuando se es más propenso a que estos dolores aparezcan.
Las causas del dolor de espalda no están del todo claras porque pueden deberse a varios factores y porque puede afectar a diferentes zonas de la espalda, pero entre las causas más conocidas de este problema están la hipermovilidad, los cambios posturales y los patrones anormales en la activación muscular.
Causas del dolor de espalda
En ocasiones este problema puede prolongarse con el tiempo y desencadenar otras molestias, es por esto por lo que para evitar este dolor se recomienda realizar una rutina de ejercicios que fortalezca la espalda y previene o alivie los dolores de espalda.
¿Cuándo es el mejor momento para realizar estos ejercicios?
Lo más adecuado para las embarazadas es comenzar con esta clase de ejercicios sobre la semana 18-20 del embarazo, para poco a poco ir cogiendo fuerza en la espalda y el transverso abdominal ya que es un músculo que estabiliza la pelvis y la columna vertebral.
A la hora de realizar ejercicios para aliviar el dolor de espalda en embarazadas, se busca que las posturas que se realicen pueden activar de forma correcta este músculo. Para realizar estos ejercicios conviene tener pelotas como la fitball que se utiliza en Pilates y Yoga y además pelotas de un tamaño más pequeño.
Asimismo, realizar estiramientos de la musculatura posterior del cuerpo, es decir, en glúteos, ingles y zona lumbar, resulta muy beneficioso para prevenir que se desarrollen dolores o problemas de espalda durante el progreso del embarazo.
Es por esto por lo que en las rutinas de entrenamiento deberíamos incluir ejercicios que tonifiquen el transverso abdominal, suelo pélvico musculatura estabilizadora y combinarlos con estiramientos de las cadenas posteriores.
¿Con qué frecuencia hacer estos ejercicios?
Para aliviar los dolores de espalda, es necesario hacer estos ejercicios al menos 3 días a la semana. No obstante, si ya practicas otros deportes como natación, pilates o yoga, puedes complementar estas actividades con estos ejercicios una o dos veces por semana.
La duración de estos ejercicios no deberían suponerte más de 10 o 15 minutos por día, y con esto sería suficiente para prevenir o disminuir tu dolor de espaldas, (y para ayudarte a prepararte mejor para el momento del parto).
Ejercicios para aliviar el dolor de espalda durante el embarazo
A continuación te vamos a dejar unos ejercicios que puedes realizar en tu casa, para fortalecer la espalda y aliviarte el dolor si lo tuvieras. Recuerda que para realizarlo necesitaras una esterilla para apoyarte sobre el suelo.
Activación del transverso y suelo pélvico en posición neutra
Ponte en el suelo boca arriba con cabeza, hombros y culo apoyados en el suelo (posición decúbito supino), con las piernas dobladas, coloca tu pelvis y tu columna vertebral en una posición neutra. Las vértebras lumbares no deben estar ni apoyadas en el suelo ni arqueadas, para ello mantén la curvatura de la espalda en posición natural y relajada. Para saber que la pelvis está en la posición adecuada deberás colocar las manos sobre caderas y pubis y poder formar un triángulo. Inspira profundamente por la nariz y lleva el aire hacia los costados, a continuación espira por la boca llevando el aire desde las costillas hasta el ombligo y cerrando los esfínteres. Repítelo 10 veces sin realizar ningún otro movimiento.
Puente sobre hombros con un balón pequeño
En la posición anterior sostiene un pequeño balón entre tus dos rodillas, inspira profundamente llevando el aire hacia los costados y al expirar el aire presiona la pelota y eleva vértebra por vértebra la columna hasta las puntas de las escápulas.Quédate arriba, alinea las rodillas, caderas y hombros para que formen una diagonal, coge aire nuevamente y al exhalar vuelve a apretar el balón y a bajar lentamente. Al igual que en el ejercicio anterior, realiza 10 repeticiones.
Elevación de tobillos
Tumbada de costado, con las piernas dobladas coloca tu pelvis en posición neutra (ambas caderas en la misma altura, una sobre otra). Apoya la mano de arriba en el suelo para tener más estabilidad e inspira profundamente y al soltar el aire activa el transverso abdominal y eleva los pies. Lo que deberás hacer es tratar de subir las pantorrillas dejando las rodillas apoyadas en el suelo. Este movimiento activa los glúteos y la musculatura lumbar, tonificando las partes más débiles del cuerpo en el embarazo. Como siempre, haz 10 repeticiones.
El gato
Ponte a cuatro patas colocando las rodillas debajo de las caderas y las manos bajo los hombros, inspira profundamente expandiendo la caja torácica y al echar el aire, activa el transverso abdominal y lleva la columna hacia el techo, a continuación arquea la espalda hacia arriba formando la posición de un gato enfadado e inspirando vuelve a la posición inicial.
Fitball
Tumbada boca arriba flexiona las piernas 90 grados y coloca un balón grande bajo ellas. Pon los brazos en posición de cruz manteniendo las muñecas alineadas con los hombros, inspira y lleva las piernas hacia un lado y otro rotando la pelvis y la columna, al soltar activa el transverso abdominal y vuelve a la posición inicial. Cambia de lado y repítelo 10 veces.
Estiramiento de glúteos y lumbares
Tumbada boca arriba con las piernas elevadas coloca los pies sobre el balón de fitball, separa las rodillas para dejar espacio para la barriga. Solo tendrás que llevar las rodillas hacia el tórax con las manos, sin ejercer presión en la barriga y mantenerte en esta postura durante unas 8 o 10 respiraciones.