Cada día somos más conscientes de la importancia de practicar deporte de manera regular con tal de cuidar nuestra salud física y mental. Realizar ejercicios con asiduidad nos ayudará a mantener nuestra figura tonificando o fortaleciendo los músculos, ganar flexibilidad, perder peso o remediar posibles dolores posturales o musculares que hayamos podido sufrir en el pasado.
Sea por el motivo que sea que realices deporte, lo más importante siempre es que encuentres los ejercicios más adecuados para ti. Así pues, antes de empezar cualquier disciplina lo mejor será que consultes al profesional de la salud cuál es la más adecuada para ti, sobre todo en el caso de que tengas alguna lesión o dolencia que pueda afectarte en el rendimiento o que pueda agravarse o empeorar durante el ejercicio físico.
Una vez hayas detectado qué tipo de deporte puedes realizar, sería conveniente que también contactases con un entrenador personal o profesional del deporte, como los que podrás encontrar en la mayoría de gimnasios, los cuales podrán aconsejarte de qué ejercicios son los más adecuados para ti, dependiendo de los objetivos que tengas en mente, tanto si son para cambiar tu figura, como para conseguir mayor fortaleza o para sentirte mejor tanto física como emocionalmente.
Recuerda que realizar deporte de manera regular será muy bueno para tu cuerpo, por todas las razones físicas que hemos nombrado anteriormente, pero también aquellas emocionales, puesto que las endorfinas que te genera el hacer ejercicio físico te ayudan a ganar energía, sentirte más descansado y relajado a lo largo del día, evitando que puedas acumular tensiones. Sin embargo, si realizamos más deporte del que nuestro cuerpo necesita es probable que éste no tenga el efecto deseado en nuestra salud física o mental, por lo que deberemos ser siempre conscientes de cuál es la cantidad de deporte adecuada para nuestro cuerpo, evitando así posibles lesiones o molestias.
Te sientes extremadamente cansada
Si hacía años que no hacías deporte, no empieces de golpe. Es decir, empieza a hacer ejercicio de manera regular. Quizás las primeras semanas solamente acudas al gimnasio entre dos o tres veces y pases una media de media hora haciendo ejercicio. Aunque te parezca que es muy poco, probablemente tengas agujetas y comiences a notar como tu cuerpo va cambiando. Es mejor que sientas pocos de estos síntomas al empezar a ir al gimnasio y dejes que tu organismo se vaya adaptando poco a poco al deporte.
De lo contrario, si empiezas demasiado rápido y vas muy a menudo al gimnasio (entre cinco y siete días a la semana) haciendo una hora de ejercicio, lo único que puedes conseguir es que te sientas extremadamente cansada, puesto que tu cuerpo no está acostumbrado a hacer tanto deporte. Además, pasando de haber tenido una vida sedentaria a tan activa de golpe puedes generarte lesiones, porque tus músculos no están aún preparados, además de sentirte extremadamente cansada, lo que te dificultará (por extraño que te parezca) conciliar el sueño por las noches. Así pues, si quieres aguantar más tiempo yendo al gimnasio y que los resultados del deporte sean óptimos, no tengas prisa.
Es más probable que te canses de hacer deporte si eres víctima del sobreentrenamiento, porque creerás que hacer deporte es sentirse extremadamente cansado, dormir mal, padecer lesiones o dedicarle muchos días y muchas horas, cuando en realidad puedes gestionarte tú misma el tiempo, simplemente sigue los consejos del profesional del deporte y de la salud y empieza, poco a poco, a hacer los ejercicios que te recomienden para obtener resultados a largo plazo, con paciencia y con mucha disciplina y perseverancia.
Dolores físicos o molestias al entrenar o después de entrenar
Debemos tener en cuenta que el sobreentrenamiento llevado al extremo puede ser realmente malo para nuestra salud. Por lo tanto, si estamos forzando nuestro cuerpo a hacer más deporte del que debería es probable que sus síntomas sean presentes al poco tiempo y debas ponerle remedio lo antes posible, si realmente quieres encontrarte bien, poder seguir haciendo deporte y que dichas dolencias no vayan a peor.
Dolor muscular
El dolor muscular puede hacerse presente durante o después del ejercicio. En este caso significará que quizás no estemos haciendo bien el ejercicio o que no sea adecuado para nosotros. A veces podrás llegar a confundir este dolor muscular con las agujetas, que se deben a que habrás ejercitado un músculo que hacía mucho que no ejercitabas y éste puede haberse llegado a resentir. Las agujetas son normales, sobre todo si hacía mucho tiempo que no practicabas deporte, pero si te causan más dolor de lo habitual probablemente tengan otra causa distinta.
Así pues, si notas dolores musculares mientras haces ejercicio o después, lo mejor será que acudas a un profesional de la salud y te asegures de que no te has causado ninguna lesión. En el caso de que este dolor sea causado por el sobreentrenamiento, es aconsejable que bajes tu ritmo de entreno y que estires adecuadamente los músculos antes y después de hacer deporte con tal de evitar posibles lesiones futuras.
Subida de pulsaciones
Otros de los síntomas del sobreentrenamiento puede ser la subida de las pulsaciones, tanto al hacer deporte como en reposo, o bien dolencias estomacales, mareos o vómitos después de entrenar. Tu cuerpo te está avisando de que lo estás forzando demasiado, por lo que si tienes alguno o algunos de estos síntomas no deberías arriesgarte y deberás cuidar de tu salud, que es lo más importante. De lo contrario, vivir con los síntomas del sobreentrenamiento pueden hacer que, a la larga, llegues a tener las defensas más bajas, lo que hará que enfermes con más facilidad, y no puedas concentrarte a hacer simples tareas diarias a causa del cansancio extremo. Algo que no te será nada bueno para tu día a día ni para entrenar adecuadamente, si es lo que quieres seguir haciendo. Recuerda que el descanso es esencial para poder entrenar como te gustaría y para hacer deporte adecuadamente.